Sin embargo, esta no es la única condición. El conocimiento y entendimiento de la historia política emergen como elementos fundamentales para apuntalar los cimientos de una gestión netamente política.

Cintura y conocimiento: dos aptitudes que deberían ser innegociables a la hora de elegir el ministro. Y en este terreno, difícilmente se pueda negar que Jorge Moreno posee ambas.

Algo que no sucedió hacia atrás con ex ministros, si revisamos la historia reciente. Quizá quien haya estado cerca de cumplir también con estas dos condiciones, haya sido el actual intendente de la Capital, Gustavo Saadi, en su paso como ministro político de la ex gobernadora Lucía Corpacci.

En el contexto actual, Jorge Moreno aparece como fiel representante de un ministerio del cual depende, en gran medida, el éxito político de un Gobierno. Es allí donde una gestión comienza a tejer y a expandir su verdadero poder.

Desafío importante tendrá Moreno. El perfil lo tiene; será el tiempo y la historia los que dirán si sus aptitudes le permitieron cumplir con creces la  función para la cual fue designado.